lunes, 6 de septiembre de 2010

Afortunado

Soy afortunado. Sí, no hay dudas que soy afortunado. Me siento afortunado por la gente que considero hoy en día mis AMIGOS (apunte señor Boirix). Pero no siempre fue así. Hubo un tiempo no que no pudiera considerar a nadie amigo mío y engordaran las listas de conocidos, sino que no tenia ningún amigo (esta afirmación si bien es cierta tiene una excepción, que espero que se sepa reconocer esa excepción si lee esto). Como e comentado en otras ocasiones llegue a un punto de marginalidad y ostracismo durante mi periodo en el instituto, pero ese periodo se alargo aun un tiempo después de salir del instituto. La soledad apareció en el instituto y siguió después de que la pesadilla pareció terminar al dejar mi persona aquel instituto. La gente suele quedar los fines de semana con los amigos para salir o si se puede hacer entre semana, pues también. Pero en mi caso llegaban los fines de semana y acudía a mi el encierro y la más de las absolutas de las soledades. No tenía relación con nadie (si exceptuamos mi familia). A causa de este encierro en mi mismo (ya que eso no significaba que no saliese a la calle, sino que no me relacionaba con nadie) llego un punto que se convirtió en tema de burla por algunas personas. Nadie se podía explicar como un chaval de esa edad no se relacionase con chicos de su edad, ni tuviese eso que denominamos vida social. En los trabajos que tuve desde que abandone el instituto no me relacione con los compañeros, solo trabajar y punto. Ante ellos se alzaba una persona seria, callada y silenciosa. Estaba seguro que mi persona no era un estorbo, no, pero era mejor pasar desapercibido, no dejar huella alguna. Es decir muerto en vida. Eso no es forma de vivir, es una forma de encerrarse en un ataúd llamado uno mismo. Este encierro en mi mismo acarreo unas carencias notables a la hora de relacionarme con los demás. Pero un buen día esa persona que parecía un eterno día encapotado vio un poco de Sol, en forma de participar con un grupo de personas y a raíz de eso, ciertas personas me aceptaron en su grupo de amistades como si fuera uno de ellos de toda la vida. Es extraño, como un grupo de personas me atormentaron y me intentaron hundir movidos por su ignorancia, miedos, tormentos y esa crueldad propia del ser humano. Y como otro grupo de personas me arroparon y me aceptaron tal cual soy con mis miles de defectos y alguna virtud que pueda tener mi persona. Esta entrada va para ellos, para mis amigos "PIRILLANES", por que soy afortunado por tenerlos como amigos. Gracias por todo.

1 comentario:

  1. GRANDE!!!!MUY GRANDE SR.FEANOR...
    TARDE O TEMPRANO SIEMPRE SALE EL SOL...
    Y SIENDO ASÍ DE GRANDE PARA TI SALDRA TODOS LOS DIAS..
    UN ABRAZO Y MENSAJE RECIBIDO.

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